Para continuar, debemos recordar que estamos ante la primera edición de ésta concentración, con lo que nos encontramos con muchos detalles buenos, pero también alguna pifiadilla.... Por ejemplo, cuando llegamos había marchado todo el mundo a hacer la ruta programada con lo que no teníamos ni idea de cómo inscribirnos, ya que no habí nadie de la organización de guardia. Montamos en una preciosa explanada que vimos por los carteles de la puerta, y las tiendas que allí habían,... y sí , acertamos !!! El resto de la concentración, se celebraba en un pabellón polideportivo a escasos 30 metros de la zona de acampada. Allí pudimos formalizar la inscripción, y conocer a Angel, el promotor de toda la movida. Un tipo majo, sin duda.
Después de la comida, tuvimos la tarde libre, para dedicarnos a nuestras cosas,....dormir, ir de bares,... en fin , menos entrar en una biblioteca o visitar monumentos...... Llegó la hora de la cena, y quizás los momentos más negativos, porque nos encontramos con una sopa castellana que no fue demasiado bien acogida por los asistentes, pero claro, nunca llueve a gusto de todos. Vueltecita por el pueblo para el café, y la segunda y quizás última pega que encontramos. El grupo que se encargaba de animar la fiesta era un grupo novel de la zona que tocaban punk-rock a un nivel demencial, con lo que el recinto se vaciaba por momentos, y la acústica aún empeoraba más. Tras unos 40 minutos en que la gente se montó la movida por su cuenta, empezaron a pinchar canciones conocidas por todos, y la cosa cambió ....la pista empezó a llenarse.
Por la mañana nos levantamos a desayunar, y dejar bastante recogido todo para no perder demasiado tiempo a la hora de regresar. Hicimos una ruta hasta el Cañón del Rio Lobos, y vuelta al pabellón para comer. Sobre las 14.00 h arrancábamos de vuelta tras un fin de semana motero de los que recordaremos con gusto.
Organizar un evento de éste calibre debe ser una empresa grande, y siempre hay cosas que se escapan. Pero a pesar de ser la primera edición, ha tenido picos de asistencia de 300 personas, y lo digo por los que son de la zona y se acercaron a comer el domingo o a la fiesta del sábado. Se echaron en falta lavabos en la zona de acampada, o algo más de variedad en el desayuno (algún tipo de zumo hubiera estado bien). A cambio nos encontramos con una fiesta muy bien montada con cerveza de calidad a un euro. En cualquier caso , podemos asegurar que es el tipo de concentración destinada a vivir muchos años.
Ahh !!!! Y en nuestras vitrinas tenemos un nuevo trofeo al Motoclub más lejano !!!
Gracias por la hospitalidad y mucha suerte !!!!
